El hecho fue perpetrado en Maipú en abril del año pasado

Por robar un kiosco junto con
menores deberá ir a juicio oral

Al confirmar la Cámara Penal de Dolores en un reciente fallo, lo resuelto por el Juzgado de Garantías interviniente, un sujeto procesado por un robo calificado en Maipú deberá ir a juicio oral.

Según las constancias colectadas durante la instrucción de la causa, siendo alrededor de las 2 horas del 15 de abril de 2008, al menos un adulto que estaba en compañía de tres menores de edad –identificados-, previo ejercer violencia sobre un postigón y ventana del frente del kiosco y puesto de diarios y revistas, ubicado este en calle Alsina casi esquina Belgrano de la ciudad de Maipú, se apoderaron de atados de cigarrillos de distintas marcas, dándose seguidamente a la fuga con lo sustraído, siendo a poco interceptados los menores a metros del lugar de los hechos, y reconocido por personal policial el mayor de edad, a pesar de haber lograr concretar su huida.

El Juez de Garantías Dr. Gastón Giles al resolver la requisitoria fiscal, negó el sobreseimiento pedido por el Defensor Oficial en favor del imputado, disponiendo elevar la causa a juicio, resolución que fue apelada ante la Cámara por el letrado defensor, considerando este que los elementos enunciados en la Requisitoria Fiscal resultaban totalmente insuficientes, y además, por no haberse probado en el expediente el delito materia de investigación, citando al propio tiempo doctrina y jurisprudencia en cuanto a las derivaciones del principio de inocencia.

Pero los Jueces de Cámara, valorando los mismos elementos que el Juez de Garantías en su resolución, que consideraron plenamente válidos, arribaron a la convicción de la probable participación del procesado en el hecho, merituando principalmente el indicio que surge del acta de procedimiento labrada por la Policía Comunal, donde se da cuenta que cuando llegó el persona al lugar del hecho, respondiendo a un alerta telefónico, uno de los malhechores estaba reducido por un uniformado, mientras que los restantes se habían dado a la fuga. El uniformado por su parte, dijo que cuando se desplazaba en un móvil policial por la zona, había escuchado un fuerte estallido, apreciando en ese momento que del interior del kiosco conocido como “de la negra Blanes”, salían cuatro jóvenes corriendo, logrando interceptar a uno e identificar al resto, uno de los cuales era “el gordo Guisondi”, de quien dio la descripción de su vestimenta, más precisamente de la campera que tenía colocada.

En oportunidad de darse cumplimiento a una orden de allanamiento y detención, la policía observó que Guisondi venía caminando, y que tenía puesta una campera con las mismas características descriptas por el policía que había llegado al kiosco en momentos en que se perpetraba el ilícito

Por ello los Camaristas indicaron en el fallo, que los indicios mencionados desvirtuaban el grado de certeza negativa necesario para el dictado del sobreseimiento, y que por el contrario, existían elementos suficientes como para elevar las actuaciones a la etapa del juicio oral.

Por ello los Dres. Susana Miriam Yaltone y Fernando Sotelo, resolvieron desestimar el recurso de apelación interpuesto, y elevar a juicio oral la causa que se le sigue a César Eraclio Guisondi, en orden al delito de Robo.

El hecho fue perpetrado en Maipú en abril del año pasado

Por robar un kiosco junto con
menores deberá ir a juicio oral

Al confirmar la Cámara Penal de Dolores en un reciente fallo, lo resuelto por el Juzgado de Garantías interviniente, un sujeto procesado por un robo calificado en Maipú deberá ir a juicio oral.

Según las constancias colectadas durante la instrucción de la causa, siendo alrededor de las 2 horas del 15 de abril de 2008, al menos un adulto que estaba en compañía de tres menores de edad –identificados-, previo ejercer violencia sobre un postigón y ventana del frente del kiosco y puesto de diarios y revistas, ubicado este en calle Alsina casi esquina Belgrano de la ciudad de Maipú, se apoderaron de atados de cigarrillos de distintas marcas, dándose seguidamente a la fuga con lo sustraído, siendo a poco interceptados los menores a metros del lugar de los hechos, y reconocido por personal policial el mayor de edad, a pesar de haber lograr concretar su huida.

El Juez de Garantías Dr. Gastón Giles al resolver la requisitoria fiscal, negó el sobreseimiento pedido por el Defensor Oficial en favor del imputado, disponiendo elevar la causa a juicio, resolución que fue apelada ante la Cámara por el letrado defensor, considerando este que los elementos enunciados en la Requisitoria Fiscal resultaban totalmente insuficientes, y además, por no haberse probado en el expediente el delito materia de investigación, citando al propio tiempo doctrina y jurisprudencia en cuanto a las derivaciones del principio de inocencia.

Pero los Jueces de Cámara, valorando los mismos elementos que el Juez de Garantías en su resolución, que consideraron plenamente válidos, arribaron a la convicción de la probable participación del procesado en el hecho, merituando principalmente el indicio que surge del acta de procedimiento labrada por la Policía Comunal, donde se da cuenta que cuando llegó el persona al lugar del hecho, respondiendo a un alerta telefónico, uno de los malhechores estaba reducido por un uniformado, mientras que los restantes se habían dado a la fuga. El uniformado por su parte, dijo que cuando se desplazaba en un móvil policial por la zona, había escuchado un fuerte estallido, apreciando en ese momento que del interior del kiosco conocido como “de la negra Blanes”, salían cuatro jóvenes corriendo, logrando interceptar a uno e identificar al resto, uno de los cuales era “el gordo Guisondi”, de quien dio la descripción de su vestimenta, más precisamente de la campera que tenía colocada.

En oportunidad de darse cumplimiento a una orden de allanamiento y detención, la policía observó que Guisondi venía caminando, y que tenía puesta una campera con las mismas características descriptas por el policía que había llegado al kiosco en momentos en que se perpetraba el ilícito

Por ello los Camaristas indicaron en el fallo, que los indicios mencionados desvirtuaban el grado de certeza negativa necesario para el dictado del sobreseimiento, y que por el contrario, existían elementos suficientes como para elevar las actuaciones a la etapa del juicio oral.

Por ello los Dres. Susana Miriam Yaltone y Fernando Sotelo, resolvieron desestimar el recurso de apelación interpuesto, y elevar a juicio oral la causa que se le sigue a César Eraclio Guisondi, en orden al delito de Robo.