Te escribo a vos, que sos madre o padre como yo de adolescentes, que van al Normal, al Mauro o a cualquier otro colegio de Maipú, que seguro hacen deportes, música, danzas, idioma, y a los que no les falta, a pesar por ahí que en el colegio les vaya bastante mal, la tele en la habitación, el DVD, el Iphone, el MP3, el celular y ni hablar la ropa de moda y de marca, todas "cosas materiales" que a muchos les parecen imprescindibles, cosas por las cuales te desvivís trabajando duro y privándote de alguna mucho más elemental, y lo dirijo a ese segmento de nuestra sociedad porque creo que es la que más posibilidades de elección tiene en la vida, pueden elegir como vivir y educar a sus hijos, y esto los hace más responsables que el común en la crianza de sus hijos, en la transmisión de los principios básicos de convivencia en sociedad.

Seguro que hasta acá no entendiste nada, simplemente quise poner un punto de partida a este relato, ahí te cuento: el sábado por la noche, tus hijos, muchos de los hijos que describí más arriba festejaron algo así como una "noche de brujas", hueca celebración, a mi criterio, heredada de tanto mirar para afuera y aborrecer lo de adentro, recorrieron las calles de Maipú, disfrazados, tocando timbre, pidiendo golosinas, hasta ahí todo tan naif como intrascendente, pero eso no es lo malo, lo irritante, lo criticable, sino lo otro, volver con tu familia de disfrutar la noche de cierre de Música del Alma y encontrar tu casa, y perdón por la expresión, "cagada a huevazos" de arriba abajo, puertas, ventanas, paredes, todo en nombre de, reitero, una celebración estúpida, absurda y ridícula, no solo porque no nos pertenece sino porque lo único que genera es que niños ¿bien educados?, sueltos por el pueblo a las diez de la noche creyéndose dueños de todo, víctimas de una sociedad de consumo que los empuja a eso.

Y vos, papá o mamá sos responsable, debiste saber que tus hijos estaban en la calle a esa hora, actuando como vándalos, como vándalos de ocho a diez o doce años, pero vándalos al fin, mocosos mal educados por Uds., tocando timbre en casas donde había gente mayor, enferma o vecinos comunes y corrientes que no merecen ser molestados hasta el cansancio por tus hijos.

Y eso es lo me que indignó, saber que en Maipú hay chicos criados sin valores inculcados desde la niñez como el respeto por los demás. Con esto lo único que logramos es que nuestros hijos se crean con derecho a cualquier cosa, y no moviliza esto que ensucien una casa, para nada, hoy me levanté y lavé todo, esto va más allá, porque esos chicos que hoy actúan así como los piqueteros o indigentes que seguramente vos puteas y tratas de "negros de mierda" por cortar una calle, mañana se subirán a una moto, que vos le compres, a un auto, que vos le des para manejar aunque tenga 15 años y harán cualquier desastre que después lamentaremos en interminables marchas de silencio o en ríos de lagrimas de arrepentimiento. Por qué no empezamos por el principio e inculcamos valores básicos, reglas mínimas de convivencia a nuestros hijos como el respeto al otro.

Seguro esto generará opiniones a favor y en contra, dirán que son los menos, simplemente decidí dar a conocer esto, porque no hay derecho, no nos merecemos amparar este tipo de actitudes, insisto, no es una pared sucia, somos muy pocos y si no logramos respetarnos que podemos pretender que nos suceda como país?

Si esto genera un debate, me daré pos satisfecho.

Renato Monte
DNI: 20039169

Gracias Renato por enviarnos esta información y tu reflexion al respecto. Hace como Renato y envianos tu opinion usando el Formulario Online

Te escribo a vos, que sos madre o padre como yo de adolescentes, que van al Normal, al Mauro o a cualquier otro colegio de Maipú, que seguro hacen deportes, música, danzas, idioma, y a los que no les falta, a pesar por ahí que en el colegio les vaya bastante mal, la tele en la habitación, el DVD, el Iphone, el MP3, el celular y ni hablar la ropa de moda y de marca, todas "cosas materiales" que a muchos les parecen imprescindibles, cosas por las cuales te desvivís trabajando duro y privándote de alguna mucho más elemental, y lo dirijo a ese segmento de nuestra sociedad porque creo que es la que más posibilidades de elección tiene en la vida, pueden elegir como vivir y educar a sus hijos, y esto los hace más responsables que el común en la crianza de sus hijos, en la transmisión de los principios básicos de convivencia en sociedad.

Seguro que hasta acá no entendiste nada, simplemente quise poner un punto de partida a este relato, ahí te cuento: el sábado por la noche, tus hijos, muchos de los hijos que describí más arriba festejaron algo así como una "noche de brujas", hueca celebración, a mi criterio, heredada de tanto mirar para afuera y aborrecer lo de adentro, recorrieron las calles de Maipú, disfrazados, tocando timbre, pidiendo golosinas, hasta ahí todo tan naif como intrascendente, pero eso no es lo malo, lo irritante, lo criticable, sino lo otro, volver con tu familia de disfrutar la noche de cierre de Música del Alma y encontrar tu casa, y perdón por la expresión, "cagada a huevazos" de arriba abajo, puertas, ventanas, paredes, todo en nombre de, reitero, una celebración estúpida, absurda y ridícula, no solo porque no nos pertenece sino porque lo único que genera es que niños ¿bien educados?, sueltos por el pueblo a las diez de la noche creyéndose dueños de todo, víctimas de una sociedad de consumo que los empuja a eso.

Y vos, papá o mamá sos responsable, debiste saber que tus hijos estaban en la calle a esa hora, actuando como vándalos, como vándalos de ocho a diez o doce años, pero vándalos al fin, mocosos mal educados por Uds., tocando timbre en casas donde había gente mayor, enferma o vecinos comunes y corrientes que no merecen ser molestados hasta el cansancio por tus hijos.

Y eso es lo me que indignó, saber que en Maipú hay chicos criados sin valores inculcados desde la niñez como el respeto por los demás. Con esto lo único que logramos es que nuestros hijos se crean con derecho a cualquier cosa, y no moviliza esto que ensucien una casa, para nada, hoy me levanté y lavé todo, esto va más allá, porque esos chicos que hoy actúan así como los piqueteros o indigentes que seguramente vos puteas y tratas de "negros de mierda" por cortar una calle, mañana se subirán a una moto, que vos le compres, a un auto, que vos le des para manejar aunque tenga 15 años y harán cualquier desastre que después lamentaremos en interminables marchas de silencio o en ríos de lagrimas de arrepentimiento. Por qué no empezamos por el principio e inculcamos valores básicos, reglas mínimas de convivencia a nuestros hijos como el respeto al otro.

Seguro esto generará opiniones a favor y en contra, dirán que son los menos, simplemente decidí dar a conocer esto, porque no hay derecho, no nos merecemos amparar este tipo de actitudes, insisto, no es una pared sucia, somos muy pocos y si no logramos respetarnos que podemos pretender que nos suceda como país?

Si esto genera un debate, me daré pos satisfecho.

Renato Monte
DNI: 20039169

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